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In&Out (por dentro y por fuera)



Esta semana, gracias a un envío recibido por partida doble (Lucero & Vica), llegó a mis manos un mensaje que me encantó y por ello, decidí compartirlo con mis contactos a través del Facebook.

A la imagen acompañaba el siguiente texto:

Jamás pierdas el estilo.
No importa que tan mal te fue hoy continúa caminando erguido y sin perder el estilo como si no hubiera pasado nada!!!!!!
¡Mañana será un nuevo día!


La intensidad de la imagen y el estado del gallo despertaron rápidamente comentarios. De una u otra forma muchos nos sentíamos identificados con el gallo, cuántas veces nos ha ocurrido tener un muy mal día, una semana terrible (o incluso meses… prefiero no poner años), donde no solo pareciera que nos levantamos con el pie izquierdo sino además sentimos que el universo entero conspira en nuestra contra.

Nos encontramos golpeados, sin plumas, desaliñados, a todas luces (desde el exterior al menos) vencidos. Pero, ¿podría suceder que a pesar de todo este golpe externo, algo a nuestro interior se mantuviera entero? ¿Podría darse el caso de que a pesar de la mala imagen que nos devuelve el espejo social, la mira ajena, el juicio de nuestro entorno, en el fondo, sigamos enteros?...

Comparto con Uds. una experiencia reciente. En una entrega pasada (Coaching Ahora: El fútbol, el Mundial y la Felicidad) compartía algunos “tips” para decidir optar por la felicidad. Entre ellos se destacaba la gratitud y una forma sencilla de fomentarla sugería escribir todas las noches 5 motivos de gratitud. Allí los invité, y me invité a mí misma, a desarrollar esa sencilla y saludable práctica. Y así lo hice. No todos los días, a veces me duermo, pero cuando lo recuerdo disfruto de hacerlo.

Un día, de esos negros, en que sentía que todo me había salido mal, llegué a casa muy decaída, al mirarme al espejo me veía muy similar a nuestro amigo “el gallo”. Estaba triste, molesta… un cocktail de mala vibra en general. Cogí igualmente mi agenda para escribir mis 5 motivos de gratitud del día, casi creo para demostrarme que realmente mi día había sido tan malo que no tendría nada que registrar.

¿Pero qué creen que sucedió? Sin darme cuenta conecté con algo que a pesar de toda esa nube negra merecía toda mi gratitud, y luego otra cosa y luego otra… Escribí una lista de 9 cosas realmente importantes por las cuales sentir gratitud. Mi día no había sido sólo esa suma de cosas negativas, esas frustraciones y problemas; en mi día había habido más y de lo bueno, pero simplemente fui incapaz de verlo durante todo el día. En ningún momento decidí verlo, registré solo lo negativo.

Es un ejemplo sencillo, lo sé. Especialmente cuando lo que nos nubla no es “un mal día”, sino un período, un estado. Pero me atrevo a creer que si miramos a nuestro interior, si nos permitimos ver más allá de solo lo negativo, más allá de la fea imagen que nos devuelve el espejo; podemos encontrar lo bueno, lo sano, esa fuerza que nos puede permitir caminar erguidos, dormir tranquilos, y confiar en que mañana será otro día.

En clave de Coaching (entiéndase Coaching como “entrenamiento para vivir una vida más plena”) me pregunto:

¿Cuáles son mis motivos de gratitud más profundos?, si las cosas a mi exterior, en mi entorno, se derrumban, ¿cuáles son las anclas que tengo a mi interior para levantarme nuevamente?

Comentarios

  1. Muy buen post Andrea, disfrute mucho leerlo!!!!!

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  2. Andre, tienes mucha razón.... debemos ver más allá de nuestra nube negra que nos persigue en ocasiones. Yo creo tener una nubecilla gris por momentos que me persigue en el trabajo.....pero debo registrar mis buenos momentos, como la vida que llevo dentro de mi! con sus primeras pataditas. El que Dios me conceda casi todo lo que pido....le pedí tener un un bb y me lo dió, le he pedido tantas cosas así como se las agradezco todos los días, o casi todos los días. El tener una familia pendiente de mi. El estar viva y poder gozar de mi familia, en especial mis padres.
    Son muchas cosas Andre... por las cuales debo estar bien plantada y por las que estoy muy agradecida, esas cosas que me dan fuerzas para seguir como ese gallito....aunque haré que esa nube negra no me desplume tanto! jajaj...eso espero.

    Gracias por tus mensajes, que transmiten mucho.

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  3. Andrea, te felicito por el blog, muy buenas las notas que pones!! Se ve que eres una muy buena profesional y coach. Espero que siga el blog, muchos éxitos!

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